lunes, mayo 21, 2007

Educación


"La educación encierra un tesoro"

Ese fue el nombre que otorgó la Unesco al informe de Jacques Delors sobre educación. Dicho informe analiza los pormenores educativos, apuntando hacia la equidad y la calidad.

Pero no es del informe Delors sobre lo que quiero hablar, sino de las incongruencias que existen en materia educativa.

Si analizamos cualquier informe sobre calidad de la educación, encontraremos apartados relacionados con la evaluación. En estos apartados se señala que la evaluación no debe ser vista como un instrumento de finalización solamente, sino que debe abordar todo un proceso, debe ser formativa y tendiente a realizar cambios sustanciales en los niveles de aprendizaje de los alumnos. También señala que la evaluación debe significar un trabajo corporativo y cooperativo, debe tomar en cuenta las diferencias individuales de los alumnos y debe adecuarse a los distintos ritmos de aprendizaje de los educando. Hasta aquí todo bien, pero ¿es esto verídico o estamos frente a una utopia de lo que es un proceso evaluativo? ya responderemos esta interrogante.

Estos informes sobre educaciòn señalan, además, la gran relevancia que posee el contexto en materia educativa, la motivaciòn, la disposición del aula, las relaciones interpersonales, todo es factor que afecta el buen desempeño educativo. Ahora bien, si nos ponemos a analizar como se entiende la evaluación y como se mide la calidad educativa, pareciera que lo que dicen los informes no es más que el reflejo de algunos budas sentados en sus sillones reflexionando sobre un sistema que desconocen oque utopicamente tienen grabados en sus mentes, porque la realidad es muy muy distinta a lo que planetan todos aquellos informes elaborados por grandes comisiones de expertos.

hoy por hoy se ve la educación como un producto mercantilista y se mide su efectividad en términos de resultados de pruebas estandarizadas (simce, psu, pisa, etc) lo que conlleva a una homogenización del sistema educativo, dejando fuera las diferencias individuales, la influencia del contexto y la innovación que el docente pueda realizar en el aula.

Nos piden innovar y desde el mando central gubernamental nos dicen que un colegio es mejor que otro si sus alumnos rinden mejor en una prueba que no diferencia entre los ritmos de aprendizaje de los estudiantes, que no hace distinciòn con los alumnos integrados, y que no considera a los alumnos diferenciales.

Ahora, se propone una reforma a la Ley Organica Constitucional de educación (LOCE) en la cual se habla de que los colegios no pueden seleccionar quien ingresa bajo el pretexto de atención a la diversidad y potenciación de una educación igualitaria y equitativa ¿seguirán midiendo la efectividad de las escuelas a través del simce y la psu? porque si hablamos de igualdad y equidad dichas pruebas no se justifican ya que propugnan la desigualdad de oportunidades para los educando.

La educación es paradojica, por un lado te plantea una utopía deslumbrante, por otro te presenta una realidad cuaestionable y por ultimo propone ideas que no tiene razón de ser.

¿cómo debiese ser un sistema educativo para ser realmente efectivo?
¿alguién tiene la respuesta?